Join AARP
Get exclusive member benefits & effect social change. Join Today
Your email address is now confirmed.
You'll start receiving the latest news, benefits, events, and programs related to AARP's mission to empower people to choose how they live as they age.
You can also manage your communication preferences by updating your account at anytime. You will be asked to register or log in.
In the next 24 hours, you will receive an email to confirm your subscription to receive emails related to AARP volunteering. Once you confirm that subscription, you will regularly receive communications related to AARP volunteering. In the meantime, please feel free to search for ways to make a difference in your community at www.aarp.org/volunteer
Get exclusive member benefits & effect social change. Join Today
La deshidrogenasa láctica (LDH) es una enzima que facilita el proceso de transformación de glucosa en energía para que las células puedan utilizar esa energía. La LDH se encuentra en muchos órganos y tejidos del cuerpo, incluidos el hígado, el corazón, el páncreas, los riñones, los músculos esqueléticos, el cerebro y las células sanguíneas.
Si una enfermedad o lesión daña las células, puede liberarse LDH en el torrente sanguíneo, lo cual incrementará el nivel de LDH en sangre. Los niveles altos de LDH en sangre indican un daño celular agudo o crónico; pero se necesitarán pruebas adicionales para determinar la causa. Los niveles de LDH anormalmente bajos no son frecuentes y, por lo general, tampoco son perjudiciales.
Existen cinco formas diferentes de LDH, que se distinguen por pequeñas diferencias en su estructura. A cada una de las formas de la enzima LDH se la denomina isoenzima y son las siguientes: LDH-1, LDH-2, LDH-3, LDH-4 y LDH-5.
Las diferentes isoenzimas de la LDH se encuentran en distintos tejidos del cuerpo. Las áreas de mayor concentración correspondientes a cada uno de los tipos de isoenzimas son las siguientes:
Los niveles de LDH se miden, por lo general, a través de una extracción de sangre, pero, casionalmente, se pueden medir utilizando orina o líquido cefalorraquídeo.
En el caso de los adultos, se extrae sangre de una vena del lado interno del codo o de la parte superior de la mano. El técnico limpia la zona donde se hará la prueba con un antiséptico y rodea la parte superior del brazo con una goma elástica para que la vena se hinche.
Luego, introduce la aguja cuidadosamente para que la sangre fluya hacia el interior de un tubo. Cuando el tubo se llena, el técnico retira la goma elástica y luego la aguja. Es probable que se coloque una venda sobre el área de la punción.
Si la prueba debe realizarse en bebés o niños pequeños, puede utilizarse una herramienta con filo denominada lanceta para tomar la muestra de sangre. En este caso, se extrae sangre y se la coloca en un pequeño tubo o portaobjetos, y luego posiblemente se coloque una venda sobre el área donde se realizó el corte.
Es normal que la persona sienta un poco de dolor cuando se introduce la aguja y un dolor pulsante luego de la extracción.
Existen algunos medicamentos y fármacos que pueden interferir en el resultado preciso de un examen de LDH. La vitamina C (ácido ascórbico) puede reducir los niveles de LDH. Algunos factores pueden elevar los niveles de LDH; entre ellos, el alcohol, la anestesia, los fluoruros y el uso de medicamentos como aspirina, plicamicina y procainamida; asimismo, la actividad física extenuante también puede elevar los niveles de LDH. Consulte al médico sobre los medicamentos que debe evitar tomar antes del examen.
Debido a que la LDH está presente en una gran cantidad de tipos de células, la presencia de niveles elevados de LDH puede indicar diversas afecciones. Si una persona presenta niveles elevados de isoenzimas de la LDH, esto puede significar lo siguiente:
Los niveles elevados de LDH indican algún tipo de daño en los tejidos; los niveles elevados en más de una isoenzima pueden representar más de una causa vinculada con el daño en los tejidos; por ejemplo, un paciente con neumonía también podría sufrir un ataque cardíaco. Si los niveles de las cinco enzimas de LDH son elevados, eso podría indicar una insuficiencia multiorgánica.
Debido a que la LDH se encuentra en una gran cantidad de tejidos del cuerpo, los niveles completos de LDH no serán suficientes por sí solos para determinar la ubicación y la causa del daño en los tejidos. También deberán medirse los niveles de isoenzimas de la LDH para poder establecer un diagnóstico. Por ejemplo, los niveles elevados de LDH-4 y LDH-5 pueden indicar un daño hepático o daño muscular, pero no puede confirmarse la presencia de una enfermedad hepática sin que se haya realizado una prueba funcional hepática completa.
Si bien es normal que una persona presente un nivel más elevado de LDH-2 que de LDH-1, luego de un ataque cardíaco, el nivel de LDH-1 se incrementa y es, por lo general, más elevado que el de LDH-2. Esto se denomina patrón invertido. El nivel total de LDH se incrementa en un período de 24 a 72 horas luego de un ataque cardíaco y llega a su nivel máximo entre los dos y cuatro días posteriores al episodio. El nivel se normaliza en un período aproximado de entre 10 y 14 días. No obstante, se ha demostrado que una prueba de troponina, que es una proteína de las células del miocardio, es un indicador más preciso de que una persona ha sufrido un ataque cardíaco.
Por lo general, se considera que una proporción normal de LDH-1/LDH-2 es una prueba confiable de que una persona no ha sufrido un ataque cardíaco.
Una vez que se le diagnostica una determinada enfermedad al paciente, los niveles de LDH pueden medirse periódicamente para controlar el avance del tratamiento.
Los niveles bajos de LDH afectan el modo en que el organismo descompone la glucosa para utilizarla como energía en las células; en particular, en las células de los músculos. Es muy poco frecuente que una persona presente niveles bajos de LDH.
Existen dos tipos de mutaciones genéticas que hacen que la persona presente niveles bajos de LDH. Las personas que presentan el primer tipo de mutación genética sienten fatiga y dolor muscular, mientras que las del segundo tipo pueden no presentar síntomas. Asimismo, una persona puede presentar niveles bajos de LDH si ha consumido una gran cantidad de ácido ascórbico (vitamina C).
Escrito por (en Inglés): Judith Epstein
Revisado médicamente (en Inglés)
: George Krucik, MD