Join AARP
Get exclusive member benefits & effect social change. Join Today
Your email address is now confirmed.
You'll start receiving the latest news, benefits, events, and programs related to AARP's mission to empower people to choose how they live as they age.
You can also manage your communication preferences by updating your account at anytime. You will be asked to register or log in.
In the next 24 hours, you will receive an email to confirm your subscription to receive emails related to AARP volunteering. Once you confirm that subscription, you will regularly receive communications related to AARP volunteering. In the meantime, please feel free to search for ways to make a difference in your community at www.aarp.org/volunteer
Get exclusive member benefits & effect social change. Join Today
Mediante una prueba de determinación de fibrinógeno se verifica el nivel de fibrinógeno en la sangre. El fibrinógeno es una proteína del plasma que se produce en el hígado y es uno de los 13 factores de coagulación responsables de la coagulación sanguínea normal.
Cuando la persona comienza a sangrar, el organismo inicia un proceso llamado cascada de la coagulación. En consecuencia, los factores de la coagulación se combinan y producen un coágulo que detiene la hemorragia. Si la cantidad de fibrinógeno no es suficiente o si la cascada no funciona normalmente, el coágulo no podrá formarse con facilidad, lo que dará lugar a una hemorragia excesiva.
Los niveles bajos de fibrinógeno también pueden causar trombosis debido al aumento de la actividad de la coagulación. Una trombosis es la formación de un coágulo en el interior de un vaso sanguíneo. El coágulo obstruye el flujo normal de sangre a través del sistema circulatorio, lo que puede ocasionar afecciones médicas graves, como ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
La prueba de determinación de fibrinógeno puede solicitarse por separado o como parte de una serie de análisis para identificar la causa de una hemorragia anormal.
El médico puede solicitar esta prueba si el paciente presenta cualquiera de los siguientes síntomas:
Posiblemente también le soliciten pruebas en los siguientes casos:
La prueba de determinación de fibrinógeno también puede realizarse como parte de una evaluación general del riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Las personas que padecen trastornos de la coagulación pueden correr un riesgo mayor de sufrir enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
No se requiere ninguna preparación especial para esta prueba. Sin embargo, el médico quizás le recomiende no tomar determinados medicamentos antes de la prueba. Es muy importante que le informe al médico si usted toma algún anticoagulante.
El médico le extraerá una muestra de sangre del brazo. Primero, se limpiará el lugar de la punción con un hisopo con alcohol isopropílico. Luego se introducirá la aguja en una vena y se colocará un tubo en el extremo para recoger la sangre.
Una vez que se haya extraído una cantidad suficiente de sangre, le retirarán la aguja y le cubrirán el lugar de la punción con una gasa.
La muestra de sangre se enviará al laboratorio para analizarla.
El nivel normal de fibrinógeno en la sangre es de 2 a 4 g/l.
Los resultados anormales pueden ser superiores o inferiores a los valores de referencia y pueden ser causados por los siguientes factores:
La afibrinogenemia es la ausencia total de fibrinógeno. Según la Canadian Hemophilia Society [Sociedad Canadiense de la Hemofilia], este trastorno afecta a cinco de cada 10 millones de personas (CHS, 2004). De las tres formas de deficiencia de fibrinógeno, esta es la que causa las hemorragias más intensas.
Hipofibrogenemia
La hipofibrogenemia se caracteriza por un nivel anormalmente bajo de fibrinógeno. En este caso, la prueba revelaría un nivel de fibrinógeno de entre 0,2 g/l y 0,8 g/l. Esta forma de deficiencia es menos frecuente que la afibrinogenemia y puede causar hemorragias de leves a intensas.
Disfibrinogenemia
La disfibrinogenemia es una afección en la cual, si bien los niveles de fibrinógeno son normales, la proteína no funciona correctamente. Según la Canadian Hemophilia Society, afecta solo a una de cada 1 millón de personas (CHS, 2012). La afección rara vez causa un problema hemorrágico. En cambio, su complicación más frecuente es la trombosis.
Como en cualquier análisis de sangre, hay riesgos mínimos.
El paciente puede presentar hematomas leves en el lugar de la punción. En casos excepcionales, la vena también puede inflamarse luego de la extracción de sangre. Esta afección, conocida como flebitis, puede tratarse con compresas tibias varias veces al día.
La hemorragia ininterrumpida podría ser un problema si usted padece algún trastorno hemorrágico o toma anticoagulantes tales como warfarina (Coumadin) o aspirina.
Si usted presenta una deficiencia de fibrinógeno, el médico probablemente le recete un tratamiento de reemplazo de factores de la coagulación para controlar o detener la hemorragia. Este tratamiento consiste en la complementación intravenosa con hemoderivados o sucedáneos de la sangre con fibrinógeno.
Esta forma de tratamiento debe usarse para aumentar los niveles de fibrinógeno a 1 g/l en las personas con hemorragias leves. Si presenta hemorragias intensas o va a someterse a una intervención quirúrgica,
será necesario aumentar los niveles de fibrinógeno a 2 g/l.
También pueden administrarse concentrados de fibrinógeno en los siguientes casos:
Escrito por (en Inglés): Corinna Underwood
Revisado médicamente (en Inglés)
: Brenda B. Spriggs, MD, MPH, FACP