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Los ganglios linfáticos son órganos pequeños y ovalados que contienen células del sistema inmunitario que atacan y eliminan a organismos invasores, como los virus. Son una parte importante del sistema inmunitario del organismo.
Los ganglios linfáticos están en diversas partes del cuerpo, como el cuello, las axilas y la ingle. Están conectados a los vasos linfáticos, que transportan por todo el cuerpo la linfa (un líquido claro que contiene glóbulos blancos y tejidos enfermos o muertos para eliminarlos). La función primaria de los ganglios linfáticos es albergar las células del organismo que combaten las enfermedades.
Cuando usted se enferma y los ganglios linfáticos envían células y compuestos para combatir enfermedades, estos podrían inflamarse o volverse dolorosos. A este trastorno de tener los ganglios linfáticos inflamados se le llama linfadenitis.
La inflamación de los ganglios linfáticos puede producirse por diversas razones. Cualquier infección o virus, inclusive un resfriado común, puede hacer que los ganglios linfáticos se inflamen. El cáncer (inclusive el cáncer de sangre) también puede hacer que los ganglios linfáticos se inflamen.
La inflamación de los ganglios linfáticos puede causar diversos síntomas, dependiendo de la razón de la inflamación y de la ubicación de los ganglios linfáticos inflamados.
Los síntomas que comúnmente acompañan la inflamación de los ganglios linfáticos son:
Normalmente, los doctores diagnostican la inflamación de los ganglios linfáticos mediante una exploración física. El médico palpará alrededor de donde se encuentran diversos ganglios linfáticos para ver si están inflamados o sensibles. También podría preguntarle acerca de cualquier síntoma asociado, como los indicados anteriormente.
Su médico podría ordenar análisis de sangre para saber si hay infecciones, así como radiografías o una tomografía computarizada para detectar tumores o fuentes de infección.
Dado que hay una amplia gama de afecciones que pueden causar inflamación de los ganglios linfáticos, su médico podría solicitar hacer una biopsia. Una biopsia de ganglio linfático es un breve procedimiento en el cual el médico toma una muestra de tejido linfático. Un patólogo (médico que examina las muestras de tejido e interpreta los resultados del laboratorio) es quien analiza dicha muestra. A menudo, la biopsia es el método más confiable para saber por qué se ha inflamado un ganglio linfático.
El tratamiento para una inflamación de ganglios linfáticos se determina según su causa. En algunos casos no hace falta hacer ningún tratamiento. Por ejemplo, es poco probable que se recomiende tratamiento a un adulto saludable cuyo organismo ya está derrotando a la infección o a niños cuyos sistemas inmunitarios, muy activos, pueden provocar inflamaciones en forma frecuente. Si se necesitara tratamiento, puede ser autotratamiento, cirugía u otras terapias.
Probablemente su médico aconseje usar un analgésico que baje la fiebre, como ibuprofeno, junto con compresas tibias. La elevación del área inflamada también puede ayudar a aliviar la inflamación.
En otros casos podría administrarse antibióticos para ayudar al organismo a combatir la infección que está haciendo que el ganglio linfático se inflame.
Si el ganglio linfático en sí se infecta, podría formarse un absceso (acumulación de pus). En general, la inflamación se reduce rápidamente cuando se drena el absceso. Para drenar el absceso, el médico adormecerá el área y hará un pequeño corte que permita que el pus escape. El área se cubrirá con una gasa para favorecer la curación.
Si la inflamación del ganglio linfático se debe a un tumor canceroso, hay diversas opciones de tratamiento. Entre ellas, se destacan la cirugía para extirpar el tumor, quimioterapia y radiación. Su médico le explicará las distintas opciones, con sus ventajas y desventajas, antes de comenzar el tratamiento.
Escrito por (en Inglés): Kati Blake
Revisado médicamente (en Inglés)
: George Krucik, MD