Existen varias pruebas de detección relacionadas con el comportamiento que pueden utilizarse para ayudar a descubrir la presencia de trastornos del espectro autista (TEA). Estas pruebas implican observar el comportamiento de una persona, así como su capacidad de comunicación y socialización. No existen pruebas de detección tales como análisis de sangre o exámenes similares que confirmen un diagnóstico de TEA.
Los Centers for Disease Control and Prevention [Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, CDC] de los Estados Unidos enumeran una serie de pruebas que podrían utilizarse para una detección inicial de problemas y también ofrecen pruebas más integrales elaboradas para confirmar un diagnóstico de TEA.
Las pruebas están elaboradas para medir el progreso en el desarrollo de un niño. Pueden utilizarse para medir el comportamiento del niño o su capacidad de aprendizaje e interacción. A menudo, las pruebas incluyen o están compuestas de preguntas para los padres.
Las pruebas que los CDC ponen a disposición para la detección del autismo incluyen las siguientes:
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Cuestionarios de edades y etapas (Ages and Stages Questionnaires, ASQ).
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Comunicación y escalas de comportamiento simbólico (Communication and Symbolic Behavior Scales, CSBS).
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Evaluación por parte de los padres del nivel de desarrollo (Parents’ Evaluation of Developmental Status, PEDS)
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Lista de verificación modificada para el autismo en niños pequeños (Modified Checklist for Autism in Toddlers, M-CHAT).
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Herramienta de detección del autismo en niños pequeños (Screening Tool for Autism in Toddlers and Young Children, STAT).
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Cuestionario de detección del espectro autista (Autism Spectrum Screening Questionnaire, ASSQ).
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Escala australiana para el síndrome de Asperger (Australian Scale for Asperger's Syndrome)
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Test del síndrome de Asperger en la infancia (Childhood Asperger Syndrome Test, CAST)
Escrito por (en Inglés): the Healthline Editorial Team
Revisado médicamente (en Inglés)
: Jennifer Monti, MD, MPH
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