No existe una única prueba para la detección del asma. Para diagnosticar el asma adecuadamente, el médico les preguntará a usted o a su hijo sobre los síntomas, los antecedentes médicos y los factores de riesgo, y les realizará una exploración física para descartar cualquier otra posible afección. Existen diversas pruebas para diagnosticar el asma.
Espirometría
La espirometría es una prueba para evaluar la función pulmonar que mide cuánto aire puede inhalar y exhalar y cuánto aire puede exhalar en un segundo. Los resultados por debajo de lo normal pueden indicar una obstrucción de las vías respiratorias. Es posible que luego el médico le administre medicamentos y repita la prueba para ver si se registra una mejoría.
Prueba de provocación bronquial
Durante una prueba de provocación bronquial, se inhala un factor desencadenante conocido del asma —metacolina o histamina— para provocar un estrechamiento de las vías respiratorias. Luego, se utiliza un espirómetro para medir la función pulmonar posterior. Si reacciona al factor desencadenante hasta un cierto nivel de sensibilidad, es probable que tenga asma. La prueba también se denomina "prueba de provocación de metacolina" o "prueba de provocación de histamina".
Flujo máximo
Un medidor de flujo máximo puede determinar la tasa de flujo espiratorio máximo (TFEM), una medida de la función pulmonar. Por lo general, es una prueba realizada por la propia persona para el control del asma, ya que el medidor de flujo máximo es fácil de usar en el hogar.
Prueba de óxido nítrico
Los niveles elevados de óxido nítrico en el aliento pueden indicar una inflamación de las vías respiratorias, lo cual es una señal común de asma. Para la prueba de óxido nítrico, debe soplar en una boquilla conectada a una máquina que mide la cantidad de óxido nítrico en el aliento.
Radiografía de tórax
Una radiografía de tórax le permitirá al médico ver el interior del tórax y examinar los pulmones. Si bien no permite realizar un diagnóstico específico del asma, puede resultar útil para descartar otros factores que pueden estar afectando la respiración, como la fractura de algún hueso, una obstrucción o afecciones como la neumonía o la bronquitis.
Escrito por (en Inglés): the Healthline Editorial Team
Revisado médicamente (en Inglés)
: Andrea Baird, MD
Esta función es sólo para fines informativos y no debe ser usado para reemplazar el cuidado y la información recibida por su proveedor de atención médica.
Por favor, consulte a un profesional con respecto a algún problema de salud que pueda tener.