Join AARP
Get exclusive member benefits & effect social change. Join Today
Your email address is now confirmed.
You'll start receiving the latest news, benefits, events, and programs related to AARP's mission to empower people to choose how they live as they age.
You can also manage your communication preferences by updating your account at anytime. You will be asked to register or log in.
In the next 24 hours, you will receive an email to confirm your subscription to receive emails related to AARP volunteering. Once you confirm that subscription, you will regularly receive communications related to AARP volunteering. In the meantime, please feel free to search for ways to make a difference in your community at www.aarp.org/volunteer
Get exclusive member benefits & effect social change. Join Today
Cualquier líquido que salga de los oídos se considera una secreción. También se le llama otorrea.
La mayoría de las veces los oídos secretan cera, que es un aceite que el organismo produce naturalmente (UMMC). La función de la cera de los oídos es evitar que el polvo, las bacterias y otros cuerpos extraños ingresen en los oídos.
Sin embargo, hay otros problemas (como un tímpano perforado) que pueden hacer que de los oídos salga sangre u otros líquidos. Esto es un signo de que se ha lastimado o infectado el oído y eso requiere atención médica.
En la mayoría de los casos, la secreción es simplemente cera que está saliendo del organismo. Esto es natural. Otras afecciones que pueden causar que se produzca una secreción son infecciones o lesiones.
Las otitis son una de las causa más comunes de las secreciones de los oídos. Las infecciones de oído se producen cuando al oído medio ingresan bacterias o virus. El oído medio está situado detrás del tímpano. Contiene tres huesos (llamados osículos) que son vitales para escuchar. Las otitis hacen que se acumule líquido en el oído, lo cual luego produce una secreción.
Los traumatismos del canal auditivo también pueden hacer que se produzcan secreciones. Tales traumatismos pueden producirse mientras se limpia el oído con un hisopo de algodón si se empuja demasiado profundamente.
El aumento de la presión, como cuando vuela en avión o hace submarinismo, puede provocar lesiones en los oídos. Estas situaciones pueden hacer que el tímpano se perfore o desgarre.
Un traumatismo acústico (daño en los oídos debido a ruidos extremadamente fuertes) también puede hacer que el tímpano se perfore. Sin embargo, estas situaciones no son comunes (NIH).
La otitis externa (comúnmente llamada oído de nadador) se produce cuando el canal auditivo se infecta con bacterias u hongos. En general ocurre cuando se pasa mucho tiempo en el agua, ya que tener demasiada humedad adentro del oído puede afectar las paredes del canal auditivo. Esto permite que ingresen bacterias u hongos y causen una infección.
Sin embargo, el oído de nadador no es exclusivo de los nadadores. Esto puede suceder toda vez que penetren organismos nocivos a través de la piel del canal auditivo. Esto podría suceder si la piel estuviera irritada a causa de un eczema o si se insertara un objeto extraño en el oído. Cualquier daño en el canal auditivo lo hace más susceptible a una infección.
Otras causas menos comunes para una otorrea son:
El tratamiento de la secreción dependerá de su causa. En algunos casos, la afección no necesitará tratamiento médico. Cuando hay que tratar una otitis, la American Academy of Pediatrics [Academia Estadounidense de Pediatría] y la American Academy of Family Physicians [Academia Estadounidense de Médicos de Familia] recomiendan el enfoque esperar y ver (Mayo Clinic).
Por lo general, los signos de una otitis comienzan a desaparecer en una o dos semanas. Para tratar el dolor y las molestias podrían recetarse analgésicos y gotas para los oídos. Si se trata de un niño menor de 6 meses o si el paciente tiene una fiebre de más de 38,8 °C, el médico podría recetar antibióticos.
En la mayoría de los casos el traumatismo del oído se cura sin tratamiento. Si la perforación del tímpano no se cura sola, podría aplicarse un parche de papel sobre el desgarro. Este parche se usa para mantener cerrado el orificio mientras el tímpano se cura. Si el parche no funciona, el médico podría reparar el tímpano quirúrgicamente usando un parche de su propia piel.
El oído de nadador debe ser tratado por un médico para evitar que la infección se propague. Por lo general, el médico receta gotas para los oídos con antibióticos que se usan por aproximadamente una semana. En los casos graves quizás se necesiten antibióticos orales.
Consulte a su médico en las siguientes situaciones:
Para evitar las otitis, evite el contacto con personas enfermas. Amamantar a los bebés les brinda protección contra otitis, ya que por la leche reciben los anticuerpos de la madre. Si alimenta a su hijo con biberón, sosténgalo en posición vertical para evitar las otitis (Mayo Clinic).
No se introduzca objetos en los oídos y así evitará perforarse los tímpanos. Si sabe que va a estar en un área excesivamente ruidosa, lleve orejeras para protegerse los tímpanos.
Para no sufrir de oído de nadador, luego de salir del agua séquese los oídos. Asimismo, incline la cabeza hacia un lado y hacia el otro para dejar drenar el agua de los oídos. Para controlar y aliviar el oído de nadador, póngase gotas para los oídos (de venta libre) luego de nadar.
Escrito por (en Inglés): Carmella Wint
Revisado médicamente (en Inglés)
: George Krucik, MD