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En los bebés, el cordón umbilical pasa a través de un orificio pequeño en los músculos abdominales. En la mayoría de los casos, el orificio se cierra poco después del nacimiento. Una hernia umbilical se produce cuando los músculos abdominales no se unen por completo y el intestino sobresale a través de este punto debilitado.
Según el Cincinnati Children's Hospital Medical Center [Centro Médico del Hospital de Niños de Cincinnati, CCHMC], las hernias umbilicales afectan a entre el 10 y el 20 por ciento de los niños (CCHMC).
Por lo general, estas hernias no provocan dolor ni suelen causar molestias. En muchos niños, se cierran espontáneamente con el tiempo. Si una hernia umbilical no se ha cerrado cuando el niño cumple los cuatro años de edad, será necesario tomar medidas para corregir el problema.
Generalmente, las hernias umbilicales se hacen visibles cuando un bebé llora, se ríe o hace fuerza para ir al baño. El síntoma más característico es una hinchazón o un bulto cerca del área del ombligo que no es posible apreciar cuando el bebé se encuentra relajado.
Los adultos también pueden tener hernias umbilicales. Los síntomas son los mismos: una hinchazón o un bulto cerca del área del ombligo. En los adultos, estas hernias pueden ser muy dolorosas, por lo que suele ser necesario recibir tratamiento.
Entre los síntomas que indican una situación más grave que requiere tratamiento médico, se incluyen los siguientes:
En la mayoría de los casos, las hernias umbilicales se producen en los bebés. Los bebés de ascendencia afroamericana, prematuros o que tuvieron peso bajo al nacer corren un riesgo aún mayor de tener una hernia umbilical. No se han observado diferencias en la prevalencia entre niños y niñas.
En los adultos, las hernias umbilicales generalmente se presentan cuando se ejerce una presión excesiva en alguna parte debilitada de los músculos abdominales debido a lo siguiente:
Tanto en los bebés como en los adultos, el médico realizará una exploración física para determinar si existe una hernia umbilical. A veces, tomará una radiografía o realizará una ecografía del área abdominal para asegurarse de que no haya complicaciones.
En los niños, las hernias umbilicales no suelen traer aparejadas complicaciones. Sin embargo, si se estrangula el cordón umbilical, pueden surgir más complicaciones tanto en niños como en adultos.
Los intestinos que no pueden regresar a su lugar a través de la pared abdominal a veces no reciben suficiente irrigación sanguínea. Esto puede provocar dolor e incluso muerte del tejido (gangrena), lo que podría ocasionar una infección peligrosa. Asimismo, si se produce una obstrucción intestinal, podría ser necesario recurrir a una intervención quirúrgica de emergencia.
En los adultos, generalmente se sugiere una intervención quirúrgica para impedir la aparición de cualquier tipo de complicaciones. En cambio, en los niños, las hernias umbilicales en general desaparecen de manera espontánea. Antes de optar por una intervención quirúrgica, el médico normalmente espera hasta que la hernia presente las siguientes características:
La intervención quirúrgica requiere una preparación mínima. Se pueden beber líquidos transparentes hasta tres horas antes de la intervención.
La intervención quirúrgica dura aproximadamente una hora. El médico realizará una incisión en el área del ombligo donde se encuentra la protuberancia. Luego, desplazará el tejido intestinal a su sitio a través de la pared abdominal. En los niños, el orificio se cierra con puntos de sutura. En los adultos, se coloca una malla para reforzar la pared abdominal.
Por lo general, el paciente puede regresar a su casa el mismo día de la intervención quirúrgica. Deben limitarse las actividades durante un período de aproximadamente una semana, durante el cual el paciente no debe reintegrarse a la escuela ni al trabajo. Además, para higienizarse, se sugieren los baños de esponja durante los primeros tres días.
La cinta adhesiva hipoalergénica que se coloca sobre la incisión generalmente se despega sola. Si esto no ocurre, espere hasta la próxima consulta de seguimiento para que el médico la retire.
Si bien son poco frecuentes, pueden presentarse complicaciones. Consulte al médico si se manifiestan los siguientes síntomas:
Escrito por (en Inglés): Shannon Johnson
Revisado médicamente (en Inglés)
: George Krucik, MD